17 de Mayo del 2024 | |
Estados Unidos | |
Frontiers Music | |
Shred Instrumetal, Neoclassical |
01. Illumination
02. Song for an Eternal Child
03. Triumph (Official Version)
04. Thrill City
05. Deep End
06. Dead of Winter
07. Mirage
08. A Prayer
09. Acapella
10. Tearful Confession
11. Icicles
12. 2 Rebeldes
Marty Friedman es un guitarrista super conocido en muchas latitudes, quien es referencia para muchos nuevos guitarristas, especialmente para los calistenicos dentro del Technical Death Metal, porque una de sus bandas como Cacophony es una fuerte influencia para todos estos nuevos músicos. Además de que siempre esta en las noticias con nuevas producciones, y nuevos acontecimientos dentro del metal, porque siempre da afirmaciones en noticias de cosas pasadas y más. Entonces, es normal que cuando un nuevo álbum de este señor está listo para ser escuchado, es inevitable no hablar al respecto, y aquellos que lo desconozcan por alguna razón extraña o porque decidieron vivir bajo una roca, pues solo pueden colocar su nombre en cualquier buscador y les saldrá toda la información de este señor. Así que como en muchas criticas de bandas ultra conocidas, pues solo me enfocaré en este nuevo disco “Drama” editado a través de Frontiers Music. ¿Qué es lo que tendremos dentro de este nuevo disco?... Pues veamos.
Después de su tremendo cariño hacia la cultura japonesa, y haber presentado 3 versiones de Tokyo Jukebox, su sonido neoclásico y cuasi medieval dentro de su ejecución regresa en este nuevo “Drama”, deja de lado la idea asiática y se centra en tener su camino, y lo que mejor sabe hacer, shreeder de alto nivel mezclado con partes Hard Rock y orquestaciones de influencias pasadas. Y obvio siempre tiene su lado metalero de por medio, porque es parte de su manera hacer música, sin olvidar que cada disco de este señor tiene un ingrediente diferente y solo las cajas japonesas tienen relación, pero todo lo demás en su discografía está alejada entre sí, y eso le da bastante versatilidad como compositor. Entonces, “Drama” de manera genérica viene a ser un disco muy personal, se siente que hay mucha pasión en cada nota, el uso de más recursos como teclados, orquestaciones, violín y demás son detalles que se te quedan perfectamente dentro de los pensamientos y encajan muy bien dentro de las sensaciones, e inclusive la idea reflexiva funciona muy bien a hasta cierto punto.
Desde que todo empieza con “Illumination” y termina con “2 Rebeldes”, el disco tiene muchas capas a nivel general, que como se mencione, regresan en cierta medida a su etapa más neoclásica por segundos, inclusión de muchos instrumentos y las orquestaciones a nivel general dentro de todo el disco son los detalles para resaltar completamente. Donde los momentos alegres como en “Thrill City” son a destacar, porque te llevan por otras instancias, ya que, de la melancolía de canciones pasadas, esta canción te cambia las sensaciones y te pone el lado rudo y versátil del disco. Luego en canciones como “Dead of Winter” de versión con letras y voz e invitado especial como Chris Brooks te regresan a su etapa más pop del guitarrista junto a la canción en español “2 Rebeldes”. Entonces, hasta este momento tenemos un disco un poco variado, pero luego el disco comienza a presionar bastante el lado melancólico, lo cual puede ser soportable hasta cierto momento, pero poco a poco el disco se hace muy introspectivo y demasiadamente personal, y las sensaciones iniciales son buenas, pero seguir presionando esto una y otra vez dentro del mismo álbum y extenderlo por 58 minutos, pues cansa y te desvía mucho de lo que pudo ser un disco más nutrido.
“Drama” de Marty Friedman tiene buenos momentos, pero que tiene su cota hasta la mitad del álbum, de ahí el disco se hace muy trillado y presiona esa sensación melancólica a cada instante, y la idea acongojada deja funcionar y cansa. Un disco que pudo tener más variedad en sensaciones y no hacerlo muy personal.
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