The Dillinger Escape Plan es una banda que se fue muy temprano de las producciones y presentaciones en vivo. Porque es de aquellas bandas que en todos los discos siempre presentaron algo distinto, jamás algo parecido, y crecieron dentro del mundo extremo de una manera inimaginable en su música. Y desde esa perspectiva muchas bandas Mathcore de nuestros tiempos tienen un poco de esta banda que fue una revolución en los 90s con su EP del mismo nombre y luego presentar una producción abrumadora con “Calculating Infinity” (1999). El cual muchos creen que fue el mejor trabajo de la banda hasta la fecha, pero eso es lo que queremos desmentir en este ranking de todos los álbumes de los estadounidenses. Porque no siempre el primer trabajo de una banda, técnicamente es el mejor trabajo a la fecha, y prueba de esto será este ranking hecho con mucha dedicación.
Después de muchas vueltas a cada álbum y con una concentración de no tener un mañana, “Ire Works” (2007) empieza esta lista de lo peor a lo mejor. Debido a que la banda al querer evolucionar en algunas sintonías más poppers y salirse de lo extremo duro que fue “Miss Machine” (2004) deja abierta muchas posibilidades de mezclas que no resultan muy bien en los conglomerados rítmicos, y existe algunos momentos de mucho relleno como en “Nong Eye Gong”, “Party Smasher” o “Milk Lizard”. Y eso solo es por mencionar algunas canciones, porque todo el disco de manera integra es tibio en comparación de previas producciones y las siguientes. Y aunque parezca injusto para algunos, la balanza de otros álbumes de la banda, pues en esta tercera producción se pierde completamente y no encuentra una buena salida rítmica en muchos sentidos. Siendo así que empieza la lista de peor a lo mejor.
Penúltimo álbum de los estadounidenses, donde su música ya estaba establecida y era una de las bandas a temer en su momento, pero, así como la banda llega con cada disco a ser destacable, coloco a “One of Us Is the Killer” (2013) en esta parte. Porque es un disco que a pesar de tener grandes canciones como la introductoria “Prancer”, la música se siente conformista en sus líneas musicales y las sensaciones repiten esa fórmula alocada. Y de ahí cuando entran a las partes pop y melódicas, todo comienza a tener pequeñas grietas que en “Ire Works” (2007) las tuvieron a mayores rasgos y muestras de esa idea inconclusa es la canción que da titulo al álbum. Comenzando seductiva, luego coros conocidos e intercambios que ya se esperan de la banda. Siendo así que la música en los 40 minutos no termina de rebanarte los sesos, y eso en The Dillinger Escape Plan es una orden.
Este quizá hubiera sido el disco que hubiera elevado la composición musical de los estadounidenses en todo sentido, porque existen nuevos esquemas, partes industriales, djent, electronicas, mathcore más psicodélico que en antaño. Pero a medida que uno escucha los 50 minutos de duración, te das cuenta que el álbum no funciona como álbum, sino como un recopilatorio de canciones de muchos lados B de un vinilo o cosas inéditas que la banda tenía guardadas, y ese es el mayor error como álbum final de la banda. Porque no se encuentra ese sabor de escuchar todo de una sola, sino seleccionar que canciones forman parte del manicomio uno y otras que forman parte del manicomio dos, y eso no funciona cuando quieres seguir de largo el disco y como muestra la conexión entre las tres primeras canciones es de ensueño, y no tiene un patrón para seguirlo, porque hasta un disco como “Disco Volante” (1995) de Mr. Bungle en su bulla tiene relación como álbum. Y eso sí, el nivel compositivo de todo el disco es inmensamente alejado de todo lo que hicieron antes, pero en un listado de lo peor a mejor, las cosas tienen que funcionar como álbum y como independientes, pues no, y por ese factor este disco entra en 4to lugar.
Segunda producción de esta maquinaria de mathcore, grindcore, progresiva, técnica y no sé qué más existe en este álbum, pero lo hay y si me olvide, pues es un disco inmensamente bruto y extremo, no tiene puntos flojos. Y la técnica es abismalmente superior a todo lo que hicieron antes o después, aquí es como si hubieras soltado al león en un grupo de gacelas, y el león entra a comer a diestra y siniestra, sin interesarle que se va a quedar sin comida de acá unos días o semanas, solo devorar todo a su paso y ver solo sangre, sudor y lagrimas a través de sus mordidas y dientes. Pero a pesar que la brutalidad y demostración abusiva de todos los instrumentos y amplia gama de voces que tiene Greg Puciato, la música al tener tanta diversidad musical en técnicas y notas musicales, se entiende como una masa incontrolable y bruta y los pequeños instantes tranquilos como en “Highway Robbery”, solo demuestran su poderío instrumental y superior a muchas bandas del mundo. Siendo ese el motivo de que entra en el puesto 3, que no se encuentra muy bien un punto de partida por parte de la banda en este álbum, y que cierren con una lenta al final, solo te dice el final, pero no como empieza la historia.
Este quizá haya sido uno de los mejores despertares de fines de los 90s en la música extrema a nivel general, porque era una masa bruta e innovadora de muchas escuelas musicales que encontraron un nuevo ente musical para tomarse en cuenta en el mundo, y que gracias a este álbum y junto a otras bandas la música desde hace unos 5 años a comenzado a ser bruta y abstracta en muchos sentidos, e inclusive se puede decir que es una masa abrupta de sensaciones toscas aceleradas y sin control que solo quieren hacerte sangrar los oídos. Y la gran ventaja del álbum, es el balance que existe entre lo que estaba pasando en el mundo, lo crudo y técnico de su música, donde el resultado fue una maquina avasalladora de música enferma y frenética. Entonces, ¿Por qué esta en segundo lugar?... Pues es simple, fines de los 90s, la tecnología para grabación ya había dado un paso adelante y aunque The Dillinger Escape Plan se mantenía en las sombras, entrar a un sello como Relapse Records te daba la posibilidad de hacer algo más despampanante, y se pudo haber conseguido una mezcla y masterización en estudio magnánima, pero no fue así, y es ahí el gran error del disco. Que a pesar de ser una piedra innovadora en el mundo extremo junto a Botch y Car Bomb en su rubro, la música a nivel audio de estudio tiene algunos detalles que no dejan divisar toda la enfermedad que el disco ya contenía de por sí, y quizá el vinilo no hubiera aguantado tremenda descarga o rango sonidos, pero ¿en CD? escucharlo con algunos defectos, pues no fue justo para tremendo disco. Por eso esta en segundo lugar dentro de este top, y muchos dirán que fue una época o un momento, pero, así como no se puede comparar los 80s con los 90s, y esos años con nuestros tiempos, pues hay cosas que se pudieron darle mejor sentido, y este es un ejemplo de ellos.
Y después de muchas líneas y muchas horas, llegamos al primer disco de la lista, donde se tiene el mejor álbum de la banda hasta la fecha y es “Option Paralysis” (2010). Donde la banda deja ese camino perdido que tuvieron en “Ire Works” (2007), pero deciden acuñar esas ideas popper sólidas y con mayor enfoque visceral de su primer disco, y al mismo tiempo colocar las masas brutas de “Miss Machine” (2004). Y colocarle ese viaje noise y abstracto que tuvieron años después en su disco despedida “Dissociation” (2016). Y aunque la producción de este no se compara a su segundo o tercer álbum, acá la banda toma esa idea primaria de su primer álbum, y detallarla perfectamente con todos los instrumentos, los juegos armónicos psicodélicos, frenéticos y enfermizos; de ahí coloca partes groove de ensueño en momentos que ellos mismos jamás volvieron a repetir. Encontrando la perfecta sincronía entre pop, brutalidad, melodía y frenetismo y finalmente noise.
Como lo dijo Puciato en una entrevista de ese álbum después de grabar durante meses el álbum y de trabajos de amanecidas y luego de años “Realmente hicimos todo lo posible para asegurarnos de que cada pequeña cosa fuera exactamente como queríamos. ¿Cuántos discos vas a ser capaz de hacer en tu vida? Es lo único que puedes mirar hacia atrás y decir: Joder, desearía que hiciéramos eso de manera diferente o lo hicimos exactamente de la manera en que íbamos a hacerlo. ¡Vas a morir sin nada, hombre! Esto va a sobrevivir a cualquiera de nosotros, con suerte” (The Bravest Metal Band interview – The Quietus, 2016), y así fue, se tiene una placa incomparable de muchos sabores poppers maduros, mathcore alocado, partes técnicas y progresivas abstractas donde lo disonante entra a calar perfectamente, y de cómo perdurará en el tiempo como el mejor disco de la banda. Y ojo este ranking me tomo más de lo debido, porque todos los discos de The Dillinger Escape Plan son incomparables, pero es lo mejor que se pudo hacer de una banda que lo tiene todo en sus álbumes, y como esta solo son pocas.